El estadio Reino de León ha acogido la fase final de la Copa del Rey Juvenil. Este sábado, se ha disputado la final después de que Real Madrid y Almería se impusieran a sus rivales el pasado miércoles. El partido disputado a las 16:30 ha terminado con la victoria del equipo madrileño por 2-1. 

El Real Madrid salía al campo mucho más metido que el Almería, controlando el balón sin prisa por llegar a la portería. El equipo dirigido por Álvaro Arbeloa no perdía el balón y en el minuto 7 después de una posesión larga llegaba un gran centro de Youssef que se paseaba por el área pequeña y Pol Fortuny, en el día de su cumpleaños, hacía el primer gol la final. 

El gol no cambiaba las tornas, los madrileños seguían controlando el juego y el Almería no se encontraba en el campo. Los rojiblancos no estaban cómodos con balón y perdían el balón muy rápido, el Real Madrid jugaba marcaban el ritmo y hacían que los indálicos corriesen detrás del esférico. 

En el minuto 16 llegaría el segundo, un mal despeje de la zaga almeriense dejaba el balón muerto en la frontal del área. El capitán blanco, Manuel Ángel, empalaba el balón con la pierna izquiera y la ponía en la mismísima esquadra. El Madrid conseguía el 2-0 y dejaba claro que querían llevarse la final. 

Pese a que no tendrían muchas más ocasiones de peligro los merengues dominaron claramente la primera mitad. Llegaba el descanso y el luminoso marcaba 2-0 a favor del equipo que llegaba como favorito. Los almerienses debían cambiar algo en el entretiempo si querían tener alguna oportunidad ante un Real Madrid que les estaba dominando con creces.

Alberto Lasarte movía el banquillo y llegaban los cambios. La segunda mitad mostraba a un Almería con otra cara, no obstante, las primeras oportunidades llegarían desde el lado blanco. Primero sería el arquero indálico, Bruno, quien negaría les negaría el gol. Pol Fortuny perdonaba dos minutos más tarde tras una buena dejada de Palacios dentro del área.

Los fallos del Madrid dieron vida al Almería que también las tuvo. Dos buenas jugadas por banda de los chicos de Lasarte creaban muy buenas ocasiones pero Joan no conseguía conectar bien con la cabeza. En el minuto 70 llegaba el gol andaluz, un error de Diego Piñeiro dejaba el balón en bandeja a Rachad que recortaba distancias en el marcador. 

El Almería perdonaría el empate un minuto más tarde. Piñeiro dejaba el balón muerto en la línea de gol, pero ningún delatero rojiblanco llegaba para empujarla y el guardametra reaccionaba rápido para salvar a su equipo. Los últimos minutos de la final estarían muy igualados pero los goles no llegaban y el Madrid se alzaba como campeón de la Copa del Rey Juvenil.