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Toni Nadal: "somos muy exigentes con los demás y muy poco con nosotros mismos"

El tío y entrenador de Rafa Nadal ha charlado en Segovia sobre entrenamiento, exigencia y superación

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Toni Nadal: "somos muy exigentes con los demás y muy poco con nosotros mismos"
Toni Nadal con el diputado de Deportes, Óscar Moral, y la responsable de Cultura de JCyL en Segovia, Ruth Llorente (J A Quirce)
José Antonio Quirce
José Antonio Quirce
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 El famoso entrenador Toni Nadal, quien aupó a la cumbre del tenis a su sobrino y pupilo, Rafa Nadal, ha ofrecido su experiencia deportiva en la charla 'Todo se puede entrenar: el éxito de la superación a través del deporte', patrocinada por el Banco de Santander y con el apoyo de la Diputación de Segovia, que ha prestado la Capilla del Museo Esteban Vicente como escenario.

TRIBUNA ha logrado declaraciones exclusivas previas al acto y Toni Nadal ha comentado a este medio algunos de los conceptos que, después, ha extendido en la charla. Sobre el valor del entrenamiento y el método en el deporte, extendido a todos los aspectos de la vida, Nadal ha comentado que "todo se puede aprender y mejorar en la vida, aunque no todo el mundo puede ser número uno; pero todo es entrenable, todo es mejorable, y depende en gran medida de la voluntad de cada individuo".

 A Toni Nadal no le gusta el concepto de 'esfuerzo' y prefiere el de 'exigencia'. "Una persona puede abrir todos los días su tienda a las 4 de la mañana", ha explicado, "éso es esfuerzo. ¿Vende más, tiene más éxito?. Sin embargo, si esa persona abre a las nueve, pero cada día se ocupa de buscar fórmulas para vender mejor, éso es exigencia. Y hay más probabilidad de éxito".

El entrenador de tenis reconoce que no hay valores absolutos ni fórmulas exactas para todo el mundo, pues "hay gente que llega a tener un gran éxito sin gran esfuerzo, pero la exigencia es el camino que da más garantías de éxito; para la inmensa mayoría es el único camino posible. Sólo unas pocas personas están dotadas con la suerte de tener un don natural, y no necesitan tanta exigencia".

Sin embargo, Toni Nadal ha comentado cómo en la actualidad, incluso desde algunas instituciones, se desdeña el valor del trabajo. Él mismo ha reconocido, a lo largo de su charla, que fue un entrenador muy duro para su sobrino Rafael y que, "esa exigencia, que logré que se convirtiera en autoexigencia, ahora se ha traducido en 22 grandes slams, y en estos momentos, Rafael está con su barco en Grecia". Según el tío del tenista, "sin exigencia, sin trabajo, quizá ahora tuviera 5 ó 6 grandes premios, y no habría llegado casi a su límite; y no tendría la recompensa de la que disfruta ahora".

Preguntado por TRIBUNA respecto a la necesidad de entrenar también momentos cruciales, como el de la retirada o el cambio de itinerario vital de cada persona, Toni Nadal ha confesado que él nunca va a indicar a nadie "cuándo ha de seguir y cuándo retirarse". El entrenador Nadal no va a "recordar a Tiger Woods con sus últimas derrotas, o a Severiano Ballesteros por los malos resultados al final de su carrera, sino por los grandes resultados a lo largo de ella". Para Toni Nadal, "la gente suele ser muy exigente con los demás, y poco con ellos mismos".

A la charla celebrada en la Capilla del Museo Esteban Vicente, con la sala abarrotada de público, han asistido numerosos empresarios locales. También ha estado presente el diputado delegado de Deportes, Óscar Moral, distintos responsables de la entidad financiera y varios miembros del Torneo de Tenis Open Castilla y León, Villa del Espinar.

Al finalizar la charla, Toni Nadal y su familia se han dirigido a El Espinar, donde el entrenador recibirá una réplica del trofeo que Rafa Nadal ganó en este Open Castilla y León, hace ya veinte años.

El trofeo original, una figura de cristal de la Real Fábrica de Cristales de La Granja, diseñada expresamente para el Open, desapareció o se perdió en algún incidente, y la voluntad de los Nadal era recuperarla para poder ser mostrada en la Academia de Tenis de Rafa Nadal, en Mallorca.

El deseo de Rafa y Toni Nadal se ha hecho posible y, en pocas semanas, los visitantes de la Academia de Tenis Nadal podrán ver en las vitrinas la réplica del trofeo segoviano que el joven Rafa ganó en 2003, hace veinte años.

 

 

 

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