El partido de la España Vaciada ha llegado al panorama político como un huracán. Las provincias que ya no tienen nada que perder han levantado la voz y 'amenazan' con jugar un papel importante en las próximas elecciones autonómicas y nacionales.

Uno de los coordinadores nacionales de la España Vaciada, Antonio Sanz, explicaba esta semana a Europa Press que los colectivos vinculados a ellos trabajan en la fórmula para afrontar "cualquier situación", como un hipotético adelanto electoral en Castilla y León y Andalucía. La idea es tener lista una plataforma política antes de que comience 2022, para que, dado el caso, se pudieran presentar ya a estos comicios anticipados. Y aunque un estudio de Sociométrica publicado por El Español les da una quincena de escaños en la Cámara Baja, ocho de ellos obtenidos en Castilla y León, sus representantes en la Comunidad tratan de calmar los ánimos.

Chema Mezquita es uno de los portavoces en Castilla y León y mira de reojo esas encuestas tan buenas para ellos. "Queda mucho por hacer. Hay que dedicar mucho tiempo y mucho trabajo" antes de echar las campanas al vuelo, avisa. Es "un poco extraño. Hay que ver cómo se ha hecho esa foto fija de la encuesta y con qué intenciones". Los ocho escaños que les atribuye el sondeo son "muy aventurados". 

El portavoz regional también replica a quienes califican a la España Vaciada de 'caballo de Troya' de los grandes partidos nacionales (PP y PSOE) para robar votos a su adversario natural o de "marca blanca" de la izquierda, como afirmaban recientemente en Vox. "Eso es mentir abiertamente", zanja. "Intentan etiquetarnos por una opinión interesada. La España Vaciada es un colectivo muy reivindicativo a nivel Castilla y León y nacional. Empezamos con las protestas en Monumenta de Sayago, que eran un palo a la Junta, y después con la autovía, que es un palo al Gobierno. Se reivindica para el territorio, al margen de quién mande. Hablar de caballo de Troya es osado y falso". En esta línea, protesta porque "nos llaman de todo y no hemos hecho nada aún" y recuerda a los grandes partidos que si la España Vaciada está creciendo "es porque no hay una respuesta para los pueblos, porque muchos están a punto de desaparecer". 

En este punto converge con el coordinador nacional, Antonio Sanz, quien destacaba en la citada entrevista que la España Vaciada abarca a gente de todo el abanico político. "Vamos a centrarnos en nuestros objetivos, y esto no va ni de derechas ni de izquierdas, sino de problemas, necesidades y soluciones", aunque se muestran abiertos a dialogar "con cualquiera".

Movimiento ciudadano

El portavoz regional, Chema Mezquita, cree que "el movimiento ciudadano es clave" para la España Vaciada. Hasta ahora ha estado "aletargado" pero ha llegado a un punto de inflexión: "es ahora o nunca". "Lo primero es tener una sociedad crítica", explica. Quien quiera optar por la vía política, puede participar en la España Vaciada y quien no, mantener esa "lucha social activa. Es clave y no sólo para obtener fines políticos. Es independiente, paralela a la política". 

La idea de la Coordinadora de la España Vaciada es construir una herramienta política para poder participar en al menos 25 provincias, que es donde tienen representación como plataforma ciudadana. "No podría especificar exactamente en cuántas, pero creo que vamos a ir en muchas provincias, aún sabiendo que en algunas de ellas no tengamos capacidad de conseguir representación", asegura Sanz, quien defiende que "hay muchísima gente que no se siente representada, que siente que sus problemas no se tienen en cuenta y que, aunque hay muchísima gente en la capital que no sufre estos problemas, por responsabilidad, por conciencia o por ellos mismos quieren participar".

En cualquier caso, la Coordinadora de la España Vaciada ya va marcando sus líneas claras en el caso de que tenga que ser decisivo para facilitar la gobernabilidad. En este punto, Antonio Sanz toma como ejemplo al diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, y ha apuntado al reequilibrio territorial y a la lucha contra la despoblación como dos grandes condicionantes a la hora de posibilitar la investidura de futuros Ejecutivos.