En el autobús siniestrado viajaban 40 personas y se dirigían a Roquetas de Mar, habiéndose producido el accidente en Cabeza de Torres, en Murcia
Investigados dos chicos de 13 años por "agresión sexual" a una chica bajo los efectos del alcohol de su misma edad
La víctima contó a los agentes que había sido violada por uno de los dos adolescentes.
La Policía está investigando una supuesta agresión sexual a una niña de 13 años en Año Nuevo en una calle del distrito madrileño de San Blas, a escasos metros la autovía M-40, han confirmado a Europa Press fuentes policiales.
Los posibles autores son dos chicos, también de 13 años y que, por lo tanto, serían inimputables en el caso de que se demostrase su culpabilidad. Los supuestos implicados y la víctima son de nacionalidad española. Todos viven por la misma zona de San Blas.
Los hechos supuestamente ocurrieron el sábado a última hora de la tarde, pasadas las 20:30 horas. Un hombre que paseaba un perro por el barrio de Las Musas cuando vio a una chica de corta edad rodeada de los chicos que tenían el pantalón bajado, por lo que alertó rápidamente a la Policía. Hasta el lugar acudieron agentes municipales, que retuvieron a uno de los chavales.
La víctima contó a los agentes que había sido violada por uno de los dos adolescentes. Fue trasladada al Hospital de La Paz por una ambulancia del Samur-Protección Civil para valoración, ha confirmado a Europa Press una portavoz de Emergencias Madrid. La chica estaba aparentemente bajo los efectos del alcohol, ha detallado el diario 'El Mundo'.
Los policías abrieron un protocolo por un caso de presunta agresión sexual e identificaron a los dos menores, que son inimputables, y avisaron de los hechos a la Fiscalía de Menores. También avisaron a sus padres para que los recogieran en comisaría. El caso ha pasado a manos de la Policía Nacional.
Ofertaban trabajos de reparación, limpieza e impermeabilización de canalones, cubiertas y tejados a personas de edad avanzada
En la operación desarrollada por la Guardia Civil se ha detenido a 10 personas; la red se movía en furgonetas de alquiler y otros vehículos
Escribió que "estadísticamente es mucho más probable que un sacerdote cometa un delito de agresión sexual contra menores de edad que delinca una persona migrante"