Cincuenta cumpleaños del Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega

WWF, el Fondo Mundial para la Protección de la Naturaleza, celebra el 50 aniversario del Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega, en Segovia, el proyecto más emblemático que trabaja en España para la conservación de estas aves, y que alberga una de las mayores colonias de buitres del mundo.

El Refugio de Rapaces fue fundado el 13 de enero de 1975 por Félix Rodríguez de la Fuente junto con la población local de Montejo, con un modelo pionero en la conservación privada que, a día de hoy, sigue ofreciendo excelentes resultados de conservación, con un censo en 2024 de 754 parejas de buitres leonados, la mayor población de Europa, junto con la colonia del vecino espacio de las Hoces del Duratón.

En 1975, el entonces vicepresidente de ADENA (asociación precursora en España de WWF, con quien se fusionó posteriormente) Félix Rodríguez de la Fuente logró poner en marcha, junto a la población local de Montejo de la Vega,  el primer acuerdo de custodia del territorio en España, un modelo pionero de la conservación privada que después fue replicado en otros espacios como el Parque Nacional de Monfragüe.

El Refugio de Rapaces se encuentra en un enclave de enorme riqueza  natural y paisajística y fue el origen del actual Parque Natural de las Hoces del Río Riaza, declarado en 2004 por la Junta de Castilla y León y parte de la Red Natura 2000.

El objetivo inicial del Refugio era recuperar y conservar la población de buitre leonado, que se estaba reduciendo drásticamente y que medio siglo después puede presumir de ser, junto a la población de las Hoces del Duratón, a pocos kilómetros de distancia, la mayor colonia de estas aves de toda Europa.

Otra especie prioritaria para el Refugio es el alimoche, un ave amenazada que en los años 90 se encontraba en declive y que actualmente ha estabilizado su número en 11 parejas en el Refugio.

El secretario general de WWF en España, Juan Carlos del Olmo, con motivo del cumpleaños del espacio natural ha manifestado que su organización se siente "ilusionada con el Refugio; estamos orgullosos del trabajo realizado y  dispuestos a trabajar y esforzarnos para afrontar los retos que tenemos por delante para que este proyecto continúe muchos años más y siga siendo un referente de la conservación".

El Refugio de Montejo es un ejemplo de participación ciudadana y laboratorio de investigación científica, que ha renovado en 2021 el acuerdo entre WWF y el Ayuntamiento de Montejo de la Vega, por el que se mantiene la colaboración al menos hasta 2031.

A lo largo de su vida, el espacio ha sido escenario de los primeros campamentos de naturaleza de España, conocidos inicialmente como el Club de los Linces, una iniciativa que comenzó en la década de los 70 y sigue activa en la actualidad.

Como laboratorio de biodiversidad, Montejo es escenario de proyectos de conservación para anfibios, peces continentales y aves asociadas a sistemas agrarios que se encuentran en un estado de conservación desfavorable. Entre ellos, destaca la restauración de puntos de agua para favorecer la reproducción de anfibios, grupo animal indicador de la calidad ambiental de una zona.

Todo el trabajo de este medio siglo ha sido recogido en una exposición de fotografías que quedará de manera permanente en el Refugio, donde se explica su historia, la labor de WWF, la relevancia de la participación ciudadana y los usos tradicionales de la zona. Además, la organización llevará a cabo diversas acciones durante este 2025 para celebrar este aniversario.

En cuanto al futuro del espacio, WWF ha declarado la satisfacción al comprobar que la Junta de Castilla y León haya retomado recientemente la redacción del Plan Rector de Uso y Gestión del Refugio, y confía en que, una vez aprobado, este documento ayude a abordar los retos de conservación.