Los cambios son principalmente relativos a las normas de condicionalidad y a los ecorregímenes, respondiendo a las demandas de flexibilidad
El encuentro 'Mujeres con voz propia' ha permitido a ASAJA Mujeres recalcar la importancia de estas en el mundo rural. La presidenta de esta organización, Blanca Carroto, ha reclamado más visibilidad para ellas, quienes cada vez son más titulares de las explotaciones agrarias y que no son comparsas de nadie. "Necesitamos más visibilidad, porque normalmente parece que la mujer va de comparsa y no, nosotras tomamos decisiones dentro de nuestras explotaciones", ha aseverado.
Carroto no ha especificado cifras sobre mujeres al frente de sus negocios en el sector primario, pero ha remarcado que el medio rural tiene oportunidades de futuro, por lo que asegurado que le encantaría que "los jóvenes volvieran a sus raíces" pese a "las carencias" y la burocracia del sector, porque hace falta "un relevo generacional real que hoy por hoy no existe en el campo".
Un retorno al campo que sí ha vivido Begoña Bello, que ha asegurado que era una "hija ideal" con una licenciatura y un máster, pero que hace once años prefirió dedicarse a lo que tenía como afición: las colmenas de miel y la explotación de los castaños que tenía su familia en la comarca leonesa del Bierzo. "Mis padres me han apoyado desde el primer momento, quizá ha sido la gente de fuera la que me ha llamado loca por dedicarme al campo y volver al pueblo, pese a tener una carrera", ha afirmado. A su juicio, en este momento las mujeres tienen "cada vez más peso en la agricultura y la ganadería, cada vez están más profesionalizadas y voluntariamente han decidido dedicarse al campo".
También lleva once años al frente de su explotación Ana Pastor, presidenta de ASAJA Mujer en Castilla y León y ASAJA Soria, que ha cifrado las incorporaciones de mujeres al sector primario en Castilla y León suponen el 30% del total, es decir, entre 15.000 y 20.000 explotaciones de las 60.000 que hay en la Comunidad.
Pastor, que se dedica al cereal y, en menor medida, al regadío, cogió las riendas de la explotación familiar tras el fallecimiento de su padre y ha reivindicado lo mismo que piden los hombres: vivir de su trabajo y dignamente, antes de recordar las protestas de esta año en el que "el sector entero, hombres y mujeres, luchan por su sector porque esto es cosa de todos".
Por su parte, la presidenta de ASAJA Mujeres, Blanca Carroto, también ha recordado que ASAJA decidió hace tres años tener una rama centrada en el mundo rural feminizado, no sólo para poner en valor el sector primario, sino para "poner voz a las agricultores y ganaderas" dentro de su asociación y en el país.
También ha tomado la palabra el presidente de ASAJA CyL, Donaciano Dujo, quien ha incidido en el carácter familiar de la mayor parte de las explotaciones y ha reconocido que, aunque su asociación luche por la rentabilidad de las explotaciones al margen de que las gestionen hombres o mujeres, "la mujer o los hijos tienen todavía más dificultades que los hombres".
Los cambios son principalmente relativos a las normas de condicionalidad y a los ecorregímenes, respondiendo a las demandas de flexibilidad
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